Rubia petera me comió la pija en una noche solitaria

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Yo laburo en un estacionamiento de microcentro que abre las 24 horas. Como soy nuevo me tocó el turno de la noche y la cosa venía bastante aburrida hasta que vi que esta puta para en la esquina de mi laburo casi todas las noches. Aproveché una noche que no había clientes y desde la puerta del estacionamiento le hice un gesto para que se acercara. Como buena perrita en celo, la zorra enseguida vino. La puta sabía que iba a tener unos mangos encima después de lo que tuviera que hacer así que ahí fue a ganarse el pan. La agarré de los pelos a la atorranta y la llevé hasta un rincón del fondo del estacionamiento. Ahí nomás la conchuda me peló la pija y empezó a chupármela como la reventada que es.