Le chupé bien la concha a esta pendeja turra que me levanté en el bar donde laburo y la dejé toda mojadita y lista para empomármela.

1 votos

Cargando...

129

Esta pendeja atorranta es una minita que cayó en el bar donde laburo en Córdoba capital, pidiendo como loca que le sirviera un vaso de fernet. Como sospeché que no tenía edad para estar ahí, cuando le pedí el documento la flaca al toque se hizo la boluda y empezó a tirarme los galgos a ver si con eso yo me olvidaba del tema y le daba lo que quería. La verdad es que además de servirle lo que me pidió, de paso me la llevé hasta mi departamento, no muy lejos de ahí, para terminar lo que la trola había empezado en el local, y fue así que me terminé comiendo a esta pendeja atorranta que muy suelta me entregó de una su conchita toda apretada.