Fue un placer saciar la sed de pija de esta morocha vendedora

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Esta tipa es una atorranta rosarina que conocí en un viaje por laburo que hice a esa ciudad. La mina atendía un carrito de gaseosas frente al monumento a la bandera, y ni bien la vi parada con esas calzas que le marcaban el terrible culo que tiene, al toque me colgué a propósito a hablarle. La mina enseguida se dio cuenta que eso iba directo a terminar en un garche así que cuando me quise acordar, la gordita puta me llevó hasta su departamento, cerca de ahí y nos pusimos a darle a la matraca como dos animales en celo .Tan fuerte me monté a la putona que creo que ni cuenta se dio cuando saqué el celular y me puse a filmarla mientras me la empomaba una y otra vez.