Descripcion
La puta de mi novia cumplió años y no sabía qué regalarle hasta que ví terrible batata para que se la entierre.
Mi novia vive con la concha caliente todo el día. Yo le doy verga cada vez que tengo oportunidad y la dejo bastante satisfecha pero esta conchuda quiere más. Así que aproveché su cumpleaños para hacerle un regalito que la acompañará largo rato cada vez que yo no esté: una pija gigante que le recuerde a mi poronga y que se la pueda enterrar bien por la concha.